Nick

Imma ChacónFecha de publicación: 17/05/2011
PVP: 16,95 €
Idioma: castellano
Edad: A partir de 12 años
Género: Novela
Colección: Luna roja
Páginas: 280
Tamaño (cm): 15,0 x 21,5
Encuadernación: Rústica con solapas
ISBN: 978-84-246-3192-5

Dafne está enamorada de un chico de su barrio, un tipo muy poco recomendable. Con la ayuda de su prima, encuentra la manera de despertar su interés: crear un perfil falso en Facebook del que él no podrá sino enamorarse. Pero entonces comienzan a suceder cosas inesperadas: alguien más se interesa por ese perfil falso, alguien que claramente no tiene buenas intenciones y que se oculta tras su nick. Comienza una persecución, un peligroso juego del gato y el ratón, entre dos personas que no se conocen en la realidad... ¿o quizá sí?

LA AUTORA: Inma Chacón

Inma Chacón es una reconocida autora de narrativa para adultos. Es doctora en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid y profesora de Documentación. Ha sido decana de la facultad de Comunicación y Humanidades en la Universidad Europe¬a. Fundó y dirigió la revista digital Binaria: Revista de Comunicación, Cultura y Tecnología. Paralelamente, La princesa india (Alfaguara) ha sido su primera incursión en el mundo de la narrativa. Las filipinianas (Alfaguara), que forma parte de una trilogía en la que está trabajando, es su última novela.

Nick es su primera novela dirigida al público juvenil. La historia de amor de una adolescente que vive conectada a las redes sociales. Una novela que cautivará a todos los jóvenes, pero también a los adultos por su trama y por la calidad literaria de esta reconocida autora.

INMA CHACÓN HABLA SOBRE NICK

Escribí Nick para tratar de entender a mi hija adolescente, la cual, cuando empecé la novela, estaba viviendo su periodo de rebeldía contra el mundo y utilizaba Internet con sus amigos como una forma más de relacionarse. Los protagonistas del libro se mueven entre dos mundos paralelos: el de Internet y el que llamamos «real», es decir, el mundo virtual y el mundo físico. Los dos son igual de «reales», y en ambos muchas veces se utiliza, en una medida u otra, la mentira y el disfraz para construir una personalidad ficticia detrás de la que esconderse.

Parto de la base de que los jóvenes aprovechan las redes sociales como una forma más de socialización, sin que ello implique abandonar otras vías (los encuentros con los amigos, la discoteca, las fiestas, los botellones, el colegio, etcétera), y que el peligro que conlleva la red está en el uso que se le dé, como en otras formas de socialización, y en el control que los padres puedan ejercer para evitar el abuso, el mal uso y la confusión que Internet puede generar.

Desde mi punto de vista, hoy en día, los jóvenes utilizan las redes sociales como una alternativa paralela y complementaria de otras maneras de socialización, y hay tantas mentiras en el «mundo físico» como pueda haberlas en el «virtual», aunque en este último, por las propias características del medio, sea más fácil urdirlas y construir un «yo alternativo», «electrónico», al que dotar de atributos «a la medida». Pero en la construcción del «yo electrónico» está implícita también la construcción del otro, «la construcción del tú», a través de la imaginación, la desinhibición, la posibilidad de usar los recursos de Internet en igualdad de oportunidades que los demás. No importa el físico (con sus limitaciones o no), ni la timidez o la extraversión; lo que importa es conocer las convenciones con las que hay que moverse, el lenguaje, la simbología y el ritual.